Manualidades para convertirte en un auténtico espía

Construye un periscopio.

Para realizar esta manualidad es necesario disponer de: Una hoja de papel, una hoja de cartulina grande (mínimo DINA-3), dos espejitos, tijeras, pegamento, cinta adhesiva y colores.

Empezamos imprimiendo en la hoja de papel los planos del periscopio que encontrarás al final de esta página.

Una vez tengamos el patrón debemos copiarlo en la cartulina con un tamaño superior al original.

Podemos pedir en papelerías o copisterías que nos hagan una fotocopia de los planos a tamaño DINA-3.

Ahora cortamos por la línea gruesa el perfil del periscopio, las ventanas y las ranuras diagonales.

A continuación doblamos por las líneas discontinuas hacia dentro formando el prisma, tal como se observa en la figura de la derecha.

Fijamos el prisma enganchando las lengüetas grises con las paredes interiores, usando el pegamento.

Las tapas superiores y posteriores cerrarán la caja.

Dejar secar el conjunto unas horas.

Colocamos los espejitos en las ranuras diagonales de manera que éstos se miren en ángulo de 45º.

Ahora, fijamos los espejos con cinta adhesiva para evitar que se salgan al mover el periscopio.

Para acabar decora el exterior del periscopio. Utiliza colores que lo camuflen con el medio.
Por ejemplo, si vas a utilizar el periscopio en el bosque utiliza pinturas de tonos verdes para pintarlo.

Y ya tenemos nuestro periscopio montado.

Busca la ventana más cercana, coge tu periscopio y observa lo que ocurre en la calle:

¡Podrás espiar sin ser visto!